QUE HAGO YO AQUÍ

SIRIA- Diario de viaje

Q-Deir er Zuz

MARTES 16/10/2007: 

Doce horas de viaje con Wissam (mi compañera de asiento) camino a Deir er Zuz, horas que se han pasado volando y en las cuales he podido penetrar, llevada por esta joven ejecutiva siriana, en el universo femenino de un país extremadamente machista a los ojos de una occidental como yo…



Mi compañera de viaje, viste pantalones vaqueros y camisa floreada en tonos rojos, pelo rubio teñido. Esta divinamente maquillada e irradia seguridad en sí misma…Se presenta a sí misma con una tarjeta de visita donde a parte del nombre de la empresa, teléfonos, móviles, faxes y e-mails se lee claramente Wissam A…. “Sales Manager”. Después de contarnos mutuamente los motivos que nos llevan hasta Deir er Zuz, ella va a una boda de una amiga, yo de momento al encuentro del rio Éufrates… comienzo a bombardearla a preguntas.
Ya os he comentado que una de las constantes de la Siria, que hasta ahora he conocido, es la omnipresente presencia masculina en la vida pública – ver a una mujer trabajando cara al público es una rara excepción que confirma esta regla. Y Wissam, no solo pertenece al pequeño grupo que integra esa excepción, además ocupa un cargo importante dentro de su empresa, así que no pude remediar dar rienda suelta a mi inagotable curiosidad….
A pesar de su preparación, confiesa la dificultad de los inicios – no, no fue fácil ganarse el respeto y la confianza de los diez hombres que trabajan bajo sus órdenes, ni el trato ahora fluido con proveedores y clientes. La emancipación de la mujer, su completa integración en la sociedad siria es todavía un camino largo y difícil de recorrer… y el principal obstáculo, como reconoce Wissan, son las propias mujeres. La gran mayoría de madres y abuelas ejercen una férrea presión para que sus hijas y sus nietas sigan desempeñando el papel de zaifahs (sexo débil). Agarrándose al Islam mas tradicionalista, infunden a sus sucesoras los mismos valores que les infundieron a ellas : la mujer es emocional, irracional, impredecible, irresponsable, incapaz de tomar decisiones y afrontar riesgos e indigna de confianza y, por lo tanto, es necesaria la supervisión, la protección y el dominio constantes del hombre sobre ella.
-Mi madre y mi abuela, me lo pusieron muy difícil cuando decidí estudiar una carrera.. y todavía aun más cuando comencé a buscar trabajo. Tuve mucha más comprensión de parte de mi padre y mi tío… además de su total apoyo hasta el día de hoy. ¡Es verdad!, mi madre, mi abuela y mis primas (mi tía menos) todavía siguen rezando para que se acaben mis tonterías, para que me case pronto, y tenga muchos hijos y así poder dedicarme a lo que una mujer de verdad se tiene que dedicar: cuidar de su marido y su familia….
Wissam es una valiente y cada vez hay más Wissam en Siria!




Le confieso, que palabras muy parecidas no hace tanto tiempo se podían escuchar en algunos hogares españoles - reflexionamos - tiene que ser difícil aceptar que ese necio destino de una vida impuesta puede ser cambiado. Para la mentalidad de muchas mujeres, intentar perpetuar a ultranza ese papel secundario que la tradición les ha asignado, explica y justifica tanta pleitesía.... Concluimos, que seguramente esa irracional y testaruda postura de puro inmovilismo, por absurdo que parezca, las absuelve de sus propios miedos y las absuelve de su mansedumbre…
-Reflexionamos- No se puede simplificar tanto… dentro del islam, el universo femenino está plagado de claro-oscuros… ¿Como cuestionar la potestad que generalmente tiene la mujer islámica dentro del seno de su familia?, ¿o la libertad de cómo afronta su cuerpo? (basta con entrar en cualquier casa de baños, para darse cuenta que la mujer islámica encara su cuerpo con mucha más libertad y naturalidad de la que se ve en los vestuarios y baños de cualquier gimnasio o piscina de mi país); ¿ o las complicidades que se desarrollan dentro de ese universo de zapatos de tacón alto y túnicas negras que cubren trajes de Dior, Chanel, Armani….y delicada lencería, entre la clase dominante?...
Wissam me habla de la egipcia Zaynab al-Ghazali y la afro-americana Amina Wadud dos nombres de peso en el feminismo islámico…Por extraño que me parezca, me explica que los movimientos feministas reivindican las raíces del propio Islam para conquistar su papel de igualdad frente a sociedades tan predominantemente machistas; tratan de re-conducir la cultura islámica a un examen más profundo de la propia tradición y releer de modo crítico los textos coránicos en relación con el universo femenino. Parece ser que en los múltiples escritos que sobre este tema han escrito mujeres musulmanas de todo el mundo, convergen tres puntos fundamentales: 
-1º/ el principio de que la emancipación de las mujeres tiene su fuente de inspiración en el Corán.
-2º/ el principio de que el texto sacro, si se interpreta bien, no establece discriminación alguna frente a las mujeres.
-3º/ el principio de que la interpretación de los textos sacros, en especial, los de la tradición jurídica. Es necesario ir más allá del significado de los “papeles” (madre, esposa, etc.) que la mujer está llamada a asumir en la sociedad, y reconocer, ante todo, su valor de persona humana, titular de derechos absolutos inalienables, como también, de su ser femenino…(principios sacados de un texto de Tariq Ramadan).
Para una agnóstica como yo es difícil entender que sean valores religiosos los que rigen y supeditan a toda una sociedad, y todavía más difícil de entender que para toda una sociedad esos valores sean absolutos e indiscutibles…Pero reconozcámoslo tres cuartas partes de la humanidad (e igual me quedo corta) todavía hace de su vida e intenta hacer la de los otros, una cuestión de fe. Creo que el pertenecer a ese pequeño grupo no me exime, no solo de mi respeto, si no de mi comprensión hacia lo diferente, así que igual que en su momento leí la Biblia, prometo a Wissan leerme el Corán.
Y dejando de un lado la cuestión religiosa, -seguimos hablando de las dificultades que tienen las mujeres para alcanzar la emancipación y el reconocimiento en una sociedad como la siria…,sobre los cambios (¿si los hay ?) que últimamente se vienen realizando en un estado en apariencia tan rígido -; el tema deriva sobre la influencia que últimamente están ejerciendo las telenovelas - "Los dramas que se exhiben en nuestros canales suelen ser sobre mujeres abusadas que no pueden luchar, o sobre mujeres malas que no pueden vivir sin destruir a otras…pero de vez en cuando cae una joyita turca que rompe esquemas…”. Parece ser que el abuso de telenovelas de corte- musulmán con unas temáticas donde se estereotipa a las mujeres como avaras, maliciosas, artificiales o débiles, frente a esas joyitas (también musulmanas) donde el papel de la protagonista es el de una mujer liberada, luchadora y totalmente apoyada por su marido está comenzando a mover conciencias…, mucho más que cualquier película o serie occidental donde la idiosincrasia es extraña.
El viaje de 12 horas se me ha hecho corto, confieso que en algún momento durante esas horas de sol intenso Wissam y yo hemos cabeceado en algún momento, pero hemos hablado tanto que apenas me he fijado en la aridez del paisaje que avanzaba kilometro a kilometro, hemos llegado a Deir er Zuz sin haber visto verdear está tierra seca ni siquiera ante la vecina presencia del rio Éufrates.



Pero de Deir er Zuz y del Éufrates os hablare mañana…. Todos los que no somos sirios al llegar a la ciudad tenemos que pasar por un control policial, a mi me atienden muy rápido y sin registros…pero los cinco turcos que venían en el autobús, parece ser, que todavía tienen para para un buen rato.



MIERCOLES 17/10/2007: 


Desde la ventana de mi habitación que da a uno de los canales del Éufrates veo amanecer… minutos después me vuelvo a dormir.
De momento, califico a Deir er Zuz como la ciudad más limpia de toda Siria, que ya es decir mucho… Y contrariamente a la impresión de ayer muy verde, llena de arbolitos y canales que roban el agua de este rio bíblico, que de alguna forma parece que lavan el polvo que llega procedente del desierto que se extiende a pocos kilómetros de ambas orillas del Éufrates. Por eso, la ciudad, a pesar de ese sol abrasador que la golpea, brilla tornasol y huele a jazmín.







Es una pequeña y prospera ciudad, que comenzó a crecer a parir de 1990, cuando se descubrió petróleo en sus alrededores…, en la calle se ven tantas bicicletas, que yo afirmaría que hay muchas más que coches… ni un solo turista. Aquí solo llega algún que otro autobús de paso, para ver las ruinas de Dura Europos y Mari, pero es raro; la proximidad de la frontera con Irak frena el turismo.
Me lo explicaron ayer a la hora de la cena, quería acostarme pronto pues estaba cansada después del largo viaje, así que decidí quedarme a cenar en el hotel (Ziad Hotel un precio y un servicio soberbio), yo en una mesa y tres mesas mas allá un grupo de hombres de mediana edad, éramos los únicos clientes; no permitieron que cenara sola, ni que pagara mi cena. Al comienzo, detecte algo de intencionalidad en sus preguntas, pero cuando comencé a hablarles de los lugares que había visto y a atiborrarlos de historia… la conversación giro 360 grados. No solo obtuve una amplia información de la zona, de sus vidas y de sus familias, sino que además me dieron un montón de sugerencias para disfrutar de la ciudad y visitar tranquilamente Dura Europos y Mari. Evidentemente la sobremesa fue larga y acabe acostándome tarde.



Junto a la plaza principal, donde luce un cartel gigantesco del presidente Bashar al-Assad (hoy 4/5/2011 acreditado como un sanguinario dictador), se encuentra el zoco, tan concurrido y animado (a pesar que ya es casi mediodía) que parece mucho más grande de que lo que realmente es, un simple paseo por los callejones donde se encuentran los puestos de hortalizas, reafirma mi teoría de que en esta pequeña ciudad los colores lucen más vivos.

Pero lo mejor de la ciudad, se encuentra entre ambas orillas del rio Éufrates, “el puente peatonal colgante” que lo cruza…



En el lado de la ciudad, me encuentro con un par de merenderos “cerrados por la mañana” y un caminito que me lleva a una pequeña playa de arena de río, donde hay dos chavales rebuscando en la orilla… alguna especie de molusco, como la conversación resulta complicada (aunque muy divertida y cargada de matices de absurdo) yo diría que se trata de una especie de mejillones de rio.

                  


En el puente a pesar de la hora (deben de ser las 2 de la tarde) hay un frescor constante que sube desde las aguas, y una fragancia de verdes intensos que llega desde los frondosos islotes que pueblan este tramo del río…al otro lado, el río se abre y solo veo remolinos y al fondo otro puente mucho más grande por donde pasan los vehículos.
Cuando lo cruzas, la ciudad es desfalcada por jardines, mas merenderos, huertos, terrenos militares y abriéndose nuevamente el desierto…


De lo que parece un colegio salen grupos de adolescentes….los chicos con los chicos y las chicas con las chicas; como el que no quiere sigo a un grupo de muchachas hasta uno de los merenderos pegados al rio, después de verlas jugar durante un buen rato, por fin consigo llamar su atención....las siete nenas sacan sus cuadernos y se sientan conmigo para practicar ingles “open the window o encaja la ventana”, resulta divertido.




Están en el último curso de secundaria y de las seis solo dos se replantean ir a la universidad. Si, puede parecer un porcentaje demasiado pequeño, pero el hecho de que todas vayan a concluir la secundaria y con un nivel que me parece bastante alto (en geografía e historia por lo menos le dan unas cuantas vueltas a nuestros chavales) presagia otro futuro para las sociedades árabes.


Mi día se ha deslizado de un al lado al otro de ese puente suspendido, que es el corazón de esta pequeña y agradable ciudad llamada Deir er Zuz, y que a la caída de la tarde poco después de la quinta llamada a la oración rebulle de vitalidad.
 







“La iglesia medieval instituyo la peregrinación a pie como cura de la melancolía homicida. Todos necesitan del acicate de una busca para vivir; para el viajero ese acicate reside en cualquier sueño” B. CHATWIN

“A fin de cuentas, lo que podríamos llamar contagio de viaje existe, y es, en el fondo, una enfermedad incurable” R. Kapuscinki